MELINA ZUKERNIK: activista ambiental
- FERNANDA TRINIDAD
- 19 may 2024
- 17 Min. de lectura
¿Quién es Melina Zukernik? ¿Cómo te defines a ti misma?
Me da la sensación que uno puede identificar que aspectos lo constituyen más a uno cuando piensa en la infancia que es cuando uno todavía está sin contaminación de todo lo que va a venir. Si pienso en ese momento creo que siempre me caracterizó la sensibilidad.
Me genera mucho dolor la violencia de cualquier tipo. Lo que ahora se conoce como bullying me ponía en un lugar de mucha observación; ahora lo veo como la fragilidad de las personas que seguramente absorben violencia y proyectan violencia.
También me chocaba mucho la falta de contemplación por lo vulnerable. Algo que despertó mucho mi curiosidad y que terminó haciendo que estudiará sociología es el tema de los comportamiento automáticos que tiene la gente. Somos espejos, nos contagiamos de lo que hacen los que están alrededor, nos contagiamos de entornos positivos y negativos. Y bueno, estar mirando todo esto diría que es lo que me caracteriza.
¿Qué es Fauna Querida? y ¿Cómo surge?
Fauna Querida en realidad nació de Perro Real que fue mi proyecto anterior. éste proyecto nadie de que toda mi vida estuve siempre muy tocada por los perros sin hogar que principalmente los veía en la calle o en las rutas cuando íbamos a una casa de fin de semana. Me volvía loca el hecho de no poder convencer a mi familia de parar para levantar uno. Aprovechando que me iba a ir a hacer una maestría fuera pensé que era buen momento para pensar que podía hacer con este tema porque nunca se fue, nunca logré que este tema dejara de importarme, al contrario. Una de las cosas que más me preocupaba era hacer un proyecto que tuviera un impacto concreto, de eso surgió la idea de recaudar fondos a través de la venta de algo para donarlos a una ONG que trabaje por el rescate con seriedad. También poder hablar de este tema, que para un montón de personas sería irrelevante, de una forma “marketinera”, que le pudiera llegar desde lo visual y tal vez desde aquí entrar en algo un poquito mas profundo que era: “Dejemos de comprar perros, dejemos de demandar perros de raza que viven en situaciones horribles de criadero y adoptemos perros de la calle. Tener un perro de raza es como tener uno igual al de a lado, y un perro de la calle viene con atributos únicos”.
Fauna Querida viene de esto; es como la herramienta que use para mi misma para no olvidarme de lo que viven estos animales y ayudarme a mi misma a hacer la transición al veganismo, esperando tal vez que los productos sirvan de recordatorio a otras personas aparte de a mi.
¿En que momento decides que quieres ser vagana y que necesitabas compartir tu experiencia con los demás a través de éste proyecto?
A través de Perro Real comencé a ir a marchas con el tema de los perros, y un día en particular una mujer habló y dijo: “Si estamos con el tema de los perros y los gatos, porque no extendemos nuestro círculo de compasión hacia los animales de los zoológicos, hacia los animales que están en los los laboratorios, hacia los animales de la granja…”. Y al terminar mencionó que iba a haber comida vagana para probar, y fui a probarla. Me pareció muy rico y como que simplemente fue una semillita.
Cuando empecé a entrar en temas de vegetarianismo, empecé a entender que comer huevos y tomar leche, si bien, no implica matar al animal implica someterlo a un sufrimiento casi peor que el de la industria de la carne. Uno siente que porque está comiendo un derivado ese animal no sufre, que sigue libre en el campo y que ocasionalmente lo llevarán a algún lado, lo ordeñaran en una granja, pero en realidad no tiene nada que ver con eso. Son lugares industrializados, metálicos, fríos donde los animales conviven con sus propias heces, pasan cosas muy brutales; y que uno porque sienta que no es la carne piensa que por algún motivo es mucho menor, y es todo lo contrario. Sentí que esto me rompía el corazón y que no podía seguir actuando igual.
¿Tu creciste en un hogar en el que comías carne?
Yo comía todo tipo de animales, de hecho nos jactábamos de probar cosas y todo me parecía riquísimo. Pero parte de ésta filosofía, porque no es una dieta, es decir: no importa que tan rico sea, si esto es terrible, yo no quiero ser parte de esto. Obviamente para llegar a esto es un ejercicio racional y emocional constante hasta que en algún punto te acostumbras y después se vuelve lo más normal del mundo.
Se que esto puede sonar hippie o medio extremo, pero para mi realmente todos los seres vivos deberían tener el derecho a vivir su vida naturalmente, sin encierros, sin explotación, y eso es inconcebible en el mundo capitalista porque es un mundo que piensa solo en ganancia y no en bienestar, incluso para las personas.
¿Qué explicación dabas o das cuando te cuestionan tu forma de vivir?
Lo más ponente que uno puede decir es: no quiero ser parte de eso, si vos querés seguir siendo parte, pero yo no quiero ser parte de esto porque me hace mal. Es casi como decir que es una alergia. A mí el dolor que me causa comer algo de esto es equivalente a un malestar físico, si me querés torturar dame carne.
Para tolerar estás situaciones, para ser fuerte en el sentido real de la palabra, se necesita estar muy aferrado a los valores y poder ser muy flexible; no solo a lo que viene del entorno porque hay que esquivar, no te podes enredar en esta conversación con todo el mundo porque la gente no está preparada. Así como yo no estaba preparada al principio. Tuve momentos en los que me fueron llegando mensajes de distintos lugares; entonces mi ejercicio también es estarme recordando que yo también estuve del otro lado. Y creo que nunca condené a los vegetarianos pero sí pensé “que raritos” en algún momento. Ahora trato de ponerme en ese lugar y entender que a todos les causa dolor separarse del “malón”, y que mi roll no es ponerme a pelear sino decir: yo creo en esto y a mí me hace daño hacerlo de otra manera y se que con esto estoy haciendo menos daño. Vos seguí como puedas, y para los comentario, el gesto es esquivarlos.
Ser flexible en recordar que las otras personas también están en sus procesos y en sus batallas y que no están listos para entender, y que si no están listos a veces es mejor no tener la conversación. Que solamente vean y quizá en algún momento se les despierte la curiosidad. Sobretodo si ven que uno está bien en eso.
Además de la cuestión animal y de todos los beneficios que el veganismo brinda al medio ambiente. ¿Qué impactó ha tenido en tu salud?
Yo sufría del estómago casi crónicamente, tuve épocas de mi vida en la que todo me caía mal. Iba a los médicos y me decían que tenía colon irritable y que no comiera hojas verdes. Cuando se sabe que las hojas verdes son casi el centro de la alimentación. De hecho comemos carne porque creemos que es saludable, y técnicamente lo que le brinda nutrientes es que el animal comió plantas. Pero lo más saludable que uno puede hace es comer hojas verdes sin mediaciones.
Mi transición al veganismo la hice de dos años, que creo que fue una gran decisión. Se me empezaron ir los problemas estomacales, y te diré hoy con una convicción del 200% que eran los lácteos. Es increíble que nos hayan lavado la cabeza para pensar que los lácteos son una fuente alimenticia cuando solamente, si miramos a la naturaleza, que es el mecanismo más perfecto que va a existir, la leche materna se toma de tu propia madre o por lo menos de tu misma especie por los primeros años de la vida. Todo lo demás es un engendro que se hizo de encerrar a una vaca, embarazarla para que produzca leche, sacarle a la cría en sus propios ojos, tal vez incluso matarla, agarrar esa leche que está llena de pus y sangre, literalmente, meterla en sistemas de pasteurización, sacarle las bacterias, ponerle otras, sacarle la lactosa, hacer un coctel. Y lo más grave es que todos lo sepamos y sigamos, y que se permita. Es grave porque hay actores vestidos de médicos y médicos reales que te dicen lo saludable que es este coctel que llamamos leche con bacterias, hormonas, antibióticos, pus, sangre, y todas esas cosas. Incluso causa osteoporosis que es la razón por la que la gente toma leche. Es increíble lo retorcido que es todo y lo potente de la publicidad.
Regresando a Fauna Querida. Quisiera me contarás acerca de la serie de cuentos “Juana de la Fauna”. ¿De dónde surge la idea de crearlos?
Bueno, Juana de la Fauna es una serie de cuentos infantiles gratuitos online en formato descargable; están pensados para formato móvil. La idea de está serie de cuentos era poder llevar el mensaje de la protección animal y de la biodiversidad. Son como una forma de profundizar este mensaje con palabras y con ilustraciones. Apuntando a los chicos que son los más permeables a este tipo de mensaje porque son todavía como plastilina, les quedan muchísimos años de formación, y también a los padres que son quienes posiblemente les lean los cuentos. Es una forma de llegar a dos públicos muy diferentes, pero los dos necesarios. Uno porque son el futuro y los otros porque son los que ahora pueden hacer un cambio, no solo hacia sus hijos sino también en sus propias vidas.
Los cuentos son de una nena que viaja con su familia. El padre es ingeniero agrónomo y la madre fotógrafa. Por el trabajo del padre, que trabaja en cultivos obviamente de vegetales, viajan por todo el país (Argentina) y a raíz de estos viajes ella va conociendo a los animales de todas las provincias, pueblos originarios, y bueno, temas relacionados al medio ambiente.
En relación con los temas que decides para tus cuentos, ¿Cómo los seleccionas?
Lo que más trato de hacer es relacionar temas de la vida cotidiana en la ciudad, principalmente la ciudad de Buenos Aires, que es donde yo vivo. El centro temático de los cuentos es entender la interconexión de las cosas, que como lo que hacemos en casa se traduce en un montón de cambios malísimos para los hábitats que son lejanos y que por nuestra miopía no los vemos, pero que no dejan de existir. Inicialmente pensé que los cuentos iban a ser más de la protección de animales, pero la protección en el fondo es la protección del lugar en donde viven los animales.
Con respecto a la biodiversidad, los principales problemas son el avance de la ganadería, las rutas de la ganadería, los pesticidas y el alimento vegetal que se produce para alimentar ganado que es lo más ineficiente del mundo además de cruel e inequitativo. El centro de los cuentos es conectar todos estos puntos a través de diferentes historias, a veces con el agua, o con el descuido del fuego, a veces con cosas que estamos comprando, entre otros. Todos los cuentos tienen su tema, pero están interconectados también porque fueron pensados en secuencia.
Respecto a las ilustraciones, ¿Cómo llegaste a las que estás utilizando tanto para Fauna Querida como para Juana de la Fauna?
Tengo una teoría que es que tendemos a ver a los animales como con menos comprensión y compasión porque no nos identificamos con sus gestualidades, porque un animal cuando tiene miedo no pone cara de miedo, sale corriendo. No tienen ese grado de expresividad que tenemos los seres humanos que tenemos mucha más sofisticación en todos los músculos de la cara.
Entonces, mi licencia creativa, la cual trabajamos con Vale Montero, a quien me recomendaron muchas personas y que cuando me junte fue como un flechazo; cuando me presentó las primeras cosas fue como que la ame, como de ¡Por favor no te vayas nunca!. El centro de todo esto fue tratar de ilustrar con bastante naturalismo todo lo que tiene que ver con los pelajes, las proporciones; no hay nada caricaturizado, pero los ojos están tratados con más humanidad. La idea era evidenciar las emociones para generar más sensibilidad y empatía. Entonces, la idea de esto era decir: bueno qué pasa si pensamos en los animales, no humanizarlos en el sentido de son igual a nosotros, pero sí en el sentido de que si tienen la capacidad de sentir como nosotros.¿Qué pasaría si interiorizamos eso?
Los cuentos son digitales, ¿Cómo puede uno tener acceso a ellos?
Para acceder a los cuentos simplemente es acceder a la pagina de juana.faunaquerida.com y en esa página hay una sección de los cuentos y una sección de contenidos que los acompañan. Pero para acceder a la primicia de los cuentos, y lo que a mi más me gustaría, es que las personas se suscriban al newsletter de los cuentos, el botón de suscripción y el formulario están ahí. Porque como este es un producto que esta pensado para que lo pueda utilizar cualquier persona de cualquier parte del mundo mientras entienda el idioma en el que está, es importante que las personas puedan dar feedback y ayudar a que esto mejore, porque la gracia de este producto es cambiar conductas, es llegar al corazón, es ponernos en el lugar de los animales, de la tierra, entendiendo a la tierra como un ser vivo en si mismo. La idea es que la gente en el newsletter pueda, no solo enterarse de que salió un cuento nuevo, sino que tumben pueda responder que le apreció y ayudar a que sea un producto que profundice su impacto.
¿Pretendes que en algún momento sean cuentos impresos?
Acá me aparece una dicotomía que es que por un lado está buenísimo trabajar con cuentos digitales, porque uno, no consumen recursos naturales y otra que son de libre acceso. Es un material que yo aspiro hacer con muchísima calidad y que la puede consumir cualquier persona que no tenga pasta y que tenga un teléfono; es conocido que la gente, mas en una situación económica y socialmente mas vulnerable, normalmente tiene un teléfono inteligente, entonces puede tener acceso a los cuentos. Pero también soy consciente que hay padres que no quieren exponer a sus hijos a pantallas, porque se sabe que no es saludable.
Entonces es algo imperfecto, es un sistema que esta en cambio, ahora es así y en algún momento, si existe una solución mejor, y está a mi alcance técnico y tecnológico, lo cambiaré, pero por ahora es esto.
Lo que imagino es que pasado un tiempo que la serie de cuentos esté terminada y haya tenido más feedback de parte de los usuarios, si me gustaría imprimirlos en un formato de abro tangible, un libro normal, pero pasado por un proceso de decantación de las ideas porque también esto es muy nuevo y como el centro de los cuentos es el impacto de sensibilización principalmente y educativo, nada mejor que estas ideas reposen por un tiempo y haya gente que las use.
Para ti, ¿Qué son los animales?
Para mi, que soy amante de Carl Sagan, astrofísico estadounidense que trato de conectar nuestra vida cotidiana con la ciencia, el microcosmos y el macrocosmos. Tanto los “animales humanos” como el resto de los animales somos puntos de vista del universo; y creo que cuando dañamos animales estamos dañando una forma de percibir la realidad que enriquece a todos.
Tanto la perdida de biodiversidad, en el sentido de los animales “no humanos”, así como la perdida de biodiversidad en el sentido de personas valiosas que por algún motivo no tienen espacio en sus sociedades para desarrollar su potencial y sacar fuera lo que llevan dentro, las dos por igual, son una perdida invaluable para la existencia.
Creo que para mí, tanto las personas como el resto de los animales, somos una sola cosa que es la existencia. Es esta posibilidad de vivir y ser conscientes de esta vivencia. Y cuando estamos dañando conciencias, o estamos produciéndolas en serie o estamos produciéndolas en un laboratorio, hay algo que estamos descuartizando y nos estamos perjudicando todos.
¿Porqué crees que las personas deberíamos tener una mayor conciencia y un mayor respeto hacia los animales y hacia su hábitat?
Creo que las personas tomamos un roll en la existencia como de supremacía, lo cual nos llevó a la dominación. Y creo que esta dominación tiene que ver con un alejamiento de la alegría que te puede producir estar en contacto con la naturaleza y entender su complejidad, entender que no es toda nuestra la tierra. Los seres humanos “fantásticos” de esta tierra hemos hecho desastes irreversibles.
Creo que las personas creen que pueden obviar la bondad hacia los animales porque son supremos, y lo que yo le pronto a las personas entonces, es pensar ¿acaso ser más inteligente es un buen motivo para abusar de gente menos inteligente? Saquemos a los animales y hablemos de las personas ya que tanto nos importan a pesar de que no se ve reflejado en ningún lado. ¿Las personas que tienen algún problema cognitiva valen menos como personas? ¿Porque una capacidad mental mayor debería ser motivo para eliminar a los demás?
¿Porqué decides nombrar a los animales que presentas en Fauna Querida?
Si tenemos que vernos más reflejados en los animales, si les ponemos nombre, cada vez nos acercamos más a la idea de que merecen vivir sus vidas porque mi amiga Melina humana merece vivir su vida, mi amiga Fernanda humana merece vivir su vida, mi amiga Bernarda la ballena merece vivir su vida, etc; porque son análogos a mi, porque nacieron, están acá y no hay motivo para pensar que me pertenezcan. Creo que una de las razones por las cuales las personas se interesan poco en los animales, es porque los toman como seres indiferenciados, como que fueran de un montón que da igual si vive este o muere porque son reemplazables. No existe ningún ser vivo idéntico a ningún otro, desde el punto de vista genético y energético.
Para mi, ponerles nombre, hacerles los ojos mas humanos, poderles dar expresión a pesar de que es diferente de la realista, son todas diferentes formas de poder contar que así como las personas todas son diferentes a pesar de quedamos todas personas, lo mismo con el resto de los animales.
En la serie de cuentos “Juana de la Fauna” mencionas el temas de la diversidad cultural y la problemática que enfrentan los pueblos originarios por el desinterés social hacia sus tradiciones, conocimientos, etc. ¿Qué problemáticas enfrentan? y ¿Porque decides darles espacio en tus cuentos?
Creo que la problemática de los pueblos originarios de Argentina es bastante similar a los pueblos originarios de todo el mundo, que es que los desplazan de sus lugares. Normalmente tienen otro sistema social y económico que no es capitalista. Toman a la tierra con otra cosmología completamente diferente a la nuestra; los colonizadores han llegado y los han barrido como que no importan, a parte de esclavizarlos y todo lo que ya sabemos, o directamente exterminarlos.
La verdad es que cuando empece a trabajar dije “voy a estar hablando de estas provincias donde hay mucha más presencia de los pueblos originarios que en Buenos Aires, donde yo vivo. Y si estoy hablando de la diversidad y de la biodiversidad, para mí también son las personas que nacen como ligadas a un territorio, aunque en algunos casos son nómadas, pero digamos que nacen de una forma de relacionarse con la tierra donde van estableciéndose o migrando por determinados lugares, aprendiendo diferentes cosas, otras visiones del mundo diferente a las mías. Y si estoy hablando de que quiero rescatar las miradas del resto de los animales con respecto a nuestra tierra para tener mas empatía con ellos, con su hábitat, con dejar de consumir cosas que alteran dramáticamente su entorno, hay un punto en el que me parece que no puedo dejar de lado los pueblos originarios de los cuales, en el momento, no sabía nada. Así comencé a investigar las problemáticas de cada provincia y las problemáticas entorno a los pueblos originarios, su cultura, a los animales.
¿Cuáles han sido, o siguen siendo, los retos u obstáculos que has tenido que enfrentar al ser activista y al llevar a cabo todos estos proyecto?
Uno de mis retos es que yo usaba Fauna Querida, no solo para mi propio cambio, sino también como una especie de escudo para poder hablar de estos temas, sin que nadie me vea a mí porque no quería ser objeto de peleas, discusiones o de incomodar a nadie. Y hablando con mucha gente y haciendo mucha terapia ecologista de grupo y esas cosas, lo que sale siempre es que dar la cara es mejor. Y bueno, para mí el mayor reto es animarme a dar la cara; buscando el equilibrio porque la verdad es que no me gusta la gente que vive para dar la cara. No sé hasta dónde hacerlo ni hasta que punto es algo que suma o empieza a restar. No sé todavía cuáles son esos parteros, los estoy explorando recién ahora. Y le he pedido a algunas personas que si me empiezo a pasar me avisen. Sigue siendo un desafío para mí, me da muchísima vergüenza, por momentos me da terror. Y bueno, a medida que lo voy haciendo tengo respuestas muy positivas, pero no deja de darme inseguridad.
Ahora estás viviendo en el País Vasco, en San Sebastián, ¿Cómo haz logrado seguir con tu proyecto a distancia? ¿Qué haz logrado hacer acá con Fauna Querida y todo lo que engloba?
Así como aproveché el viaje de mi maestría para empezar Perro Real, yo creo que este viaje lo estoy aprovechando para animarme a hablar más y a dar la cara, que era algo que no estaba haciendo en Buenos Aires. Creo que la distancia con mi propia ciudad me está ayudando. Creo que a lo que más miedo le venía teniendo era a al reacción de las personas que quiero y no tanto a los desconocidos, y un poco el estar acá me saco esa presión. Me di cuenta que era una presión medio ficticia que yo me cree y que tiene que ver con que contar estos temas a gente que uno a priori siente que no le interesan es incomodo; al igual que cualquiera quiero ser una persona querida, no quiero ser una persona que la gente diga “uff que plomo, nos vino a hablar otra vez de este tema”. Y acá siento que estuve haciendo el esfuerzo consiente de salir a decir las cosas.
Hay algo que me gusta de esta posibilidad de estar en otro lado del mundo generando un producto como más intangible que crea más valor que es lo que yo quiero que es de sensibilización y que no importa dónde esté.
¿Qué le dirías a la gente que tiene interés en cambiar su estilo de vida para beneficio del medio ambiente, de los animales y de uno mismo?
Creo que lo primero es hacer una evaluación de cuántas cosas necesitas realmente, porque ya de por si la producción, sea vagana o no, la producción industrial genera toxicidad en el aire, en el agua y en la tierra.
Con qué productos estoy dispuesto a vivir sin; de los productos que voy a querer usar, de los que me parece imposible desprenderme o tal vez decir por ahora quizá no pueda desprenderme de esto pero más adelante si me pueda desprender de alguno más. De los que no me puedo desprender, ¿cuál es la mejor opción que podría conseguir? la que tenga menos crueldad, la que sea con mayor indice de ingredientes orgánicos, la que sea mas biodegradable, la que se convierta en comida para otro, etc. La clave de la transición es que la forma más efectiva de hacer un cambio es avanzar sobre seguro. Entonces, ya llegue hasta acá y esto ya no me cuesta, ya lo incorporé. Ahora ¿qué más puedo incorporar? y que de estas cosas que pensé que nunca iba a poder sacar ¿porque las puedo reemplazar que sea algo que me encante?. Como permitirse la posibilidad de incorporar las cosas lentamente, y eso te va a generar una gimnasia que lo va a hacer cada vez más fácil. Pero tienes que empezar por algo.
Lo último que diría es que nos olvidamos que los gustos son adquiridos. No olvidemos que tenemos esta capacidad de asimilar cosas y que porque las asimilamos en la infancia no significa que nacimos con propensión a quererlas, significa que nos educaron así y nos podemos reeducar. Yo también fui de las que dije que nunca iba a poder ser vegetariana, nunca iba a poder ser vegana, y acá estoy.
¿Qué esperas que suceda con Fauna Querida? ¿Te gustaría que fuera un colectivo, o que se volviera un proyecto aun más grande con muchos más alcances?
Cuando empece, es como que quería darle lugar a otros, pero me doy cuenta ahora que estaba como muy celosa de mi idea, de mi proyecto porque era mi bebé. Pero cada vez me doy cuenta que esa idea es muy errónea y quiero cómo llegar a más personas. Ya trabajaba un poco en colaboración cuando empece, pero creo que no le estaba dando el verdadero valor que tiene, y ahora, todavía no lo logré por completo, pero estoy tratando de asimilar la idea de que siempre va a ser mejor si hay más personas aportando su valor al proyecto.
Tengo muchas deficiencias que cubrir y creo que como que el camino va haciendo que las personas adecuadas se vayan acercando, entonces, no estoy saliendo a buscarlas, pero estoy tratando de detectarlas cuando aparecen. Y ojalá que sean un montón porque esto para mí es como mi vida, mi bebé, todas esas cosas.
¿Qué sigue para Mel Zukernik?
A nivel mío, bueno, Fauna y Juana se convirtieron muy en el centro de todo porque los valores de los que hablan son los valores que trato de practicar para mi y a veces cuando no me salen es como que uso esos cuentos, esas ilustraciones para tratar de volver a esos valores. Por momentos la sociedad de consumo me llevan puesta o me dejo llevar, y soy consciente de esos momento; hay veces que me lo perdono y hay veces que digo: ¡no! pero yo quiero esto, y volver hacia eso.
También, en un sentido más artístico y menos literario, tengo ganas de hacer cosas pero todavía no se bien por dónde canalizarlas, estoy pensando un poco en eso. El tema es que me cuesta mucho pensar en hacer cosas que no tengan ningún propósito para esto. Entonces no se que va a pasar. No se si voy a lograr dejar salir la creatividad de Mel abstracta hacia cualquier rumbo o si voy a terminar haciendo algo que sea otra vez hablar de lo mismo de otra manera, y creo que esa es la más posible, porque es muy difícil ahora pensar hacer otras cosas por fuera de esto, porque es lo que más me importa.
@faunaquerida
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